Rubí se deriva de la palabra latina ruber, que significa rojo y es una especie de corubina. En la antigüedad, en India y Myanmar, alguna vez se pensó que el rubí era originalmente una piedra blanca especial, que con el tiempo absorberá la esencia del sol y la luna y eventualmente encenderá el fuego contenido en la piedra, convirtiéndose así en rojo.
Origen
La mayoría de los rubíes naturales provienen de Asia (Myanmar, Tailandia, Sri Lanka, Pakistán, China, etc.), África (Mozambique, Tanzania), Oceanía (Australia) y América (Montana y Carolina del Sur en los Estados Unidos). Hoy el rubí se produce principalmente en Mozambique.
Simbología
Rubí es la más preciosa de todas las gemas en la Biblia. Rubí también se considera la piedra del amor: la consistencia dura de la gema simboliza la eterna lealtad del amor, el maravilloso rojo simboliza la pasión, el fuego y el amor eterno.
Como el rubí está lleno de ira fuerte y colores vivos, en el pasado la gente pensaba que era la encarnación del pájaro no muerto, lo que representaba tenacidad, vitalidad, salud y buena fortuna. La leyenda dice que aquellos que llevaban rubíes tenían una vida larga y saludable, una relación feliz y una familia armoniosa.
La industria internacional de las gemas ha designado al rubí como "la piedra de nacimiento de julio", que es un símbolo de nobleza, amor y benevolencia. En Europa, las bodas reales todavía usan rubí como promesa de boda. Un hombre que posee un rubí puede controlar el poder de los sueños y una mujer que posee un rubí puede obtener el amor eterno.